Melania Trump da un paso, aunque muy pequeño, hacia la campaña de su esposo | Vanity Fair

Por Bess Levin

El mes pasado, CNN informó que Melania Trump, en su mayoría ausente de la campaña hasta la fecha, aún estaba decidiendo cuánto esfuerzo quería poner personalmente para lograr la reelección de Donald Trump. ("Es su decisión cuánto o cuán poco hará campaña", dijo una fuente familiarizada con el asunto al medio de comunicación). Ahora, parece que tenemos una respuesta: la ex primera dama está dispuesta a gastar al menos un poco de esfuerzo para ayudar a las posibilidades de su esposo, especialmente si puede hacerlo sin estar en su presencia.

Según una invitación obtenida por Politico, Melania organizará una recaudación de fondos este mes en Mar-a-Lago para recaudar dinero para los Log Cabin Republicans, que están lanzando su "Camino a la victoria", un plan para captar votantes en los estados pendulares. Como señala Politico, Melania ha mantenido "desde hace mucho tiempo" una relación cercana con el grupo, que se describe a sí mismo como "la organización republicana más grande de la nación dedicada a representar a los conservadores LGBT y aliados". En 2021, fue una invitada especial y recibió un premio en una cena que organizó en Mar-a-Lago. (Por su parte, el ex presidente recientemente se lanzó a una diatriba contra el Día Internacional de Visibilidad Transgénero que coincidió con la Pascua de este año, y ha prometido, en un segundo mandato, recortar los fondos federales para las escuelas que promueven lo que él llama "locura transgénero").

Melania no asistió a la fiesta de la victoria del Súper Martes de Trump en Mar-a-Lago (o sea, su casa) el mes pasado y, según el conteo de CNN, ha hecho solo dos apariciones formales en la campaña: cuando el ex presidente anunció su candidatura para 2024 (en 2022) y cuando ella y Trump votaron en las primarias de Florida el mes pasado. Cuando se le preguntó durante este último evento si planeaba hacer más eventos, ella respondió: "Manténganse al tanto".

En una entrevista con Megyn Kelly el año pasado, Trump intentó afirmar que la ausencia de Melania simplemente hablaba de su confianza extraordinaria (y no, digamos, su aversión por él). "Creo que parte de la belleza es ese misterio", le dijo a Kelly. "Ella es introspectiva y está segura; no necesita ser entrevistada por ti para ser destrozada sin razón. No necesita estar allí. Tiene confianza; tiene mucha autoconfianza".