La semana pasada, un tercer hombre fue arrestado por presuntamente arrojar un juguete sexual —específicamente, un consolador— hacia la cancha durante un juego de la WNBA, una tendencia que comenzó en julio y por la cual un grupo de criptomoneda ha tomado crédito, mientras afirma no estar asociado (totalmente) con las personas que han sido detenidas por la policía. Si puedes entender cada palabra individual de esa oración pero sientes que tu cerebro podría explotar al tratar de entender qué significa cada una en contexto, tenemos la solución.
Retrocedamos un momento. El 29 de julio, un hombre asistiendo a un juego de la WNBA (el Atlanta Dream contra las Valkyries del estado Dorado) arrojó un consolador verde a la cancha durante el cuarto cuarto; el juego se detuvo y un oficial pateó el objeto fuera de la cancha. Días después, en un juego entre las Valkyries y el Chicago Sky, otro consolador verde fue arrojado a la cancha durante el tercer cuarto, lo que también llevó a una interrupción en el juego. El 5 de agosto, un juguete sexual similar fue arrojado en un juego entre las Los Angeles Sparks y las Indiana Fever, aparentemente en dirección de la jugadora de las Fever, Sophie Cunningham. Se han reportado al menos dos incidentes más.
Un consorcio de operadores de criptomonedas se ha atribuido la responsabilidad de las hazañas, afirmando que fueron planeadas para promocionar una moneda meme llamada Green Dildo Coin, que fue lanzada el día anterior a que se arrojara el primer consolador. Un portavoz del grupo, que solo revelaría su nombre de usuario en redes sociales, @Daldo_Raine, le dijo a USA Today que la moneda meme fue creada como una forma de protestar contra el ambiente "tóxico" del mundo de las criptomonedas. Afirmó que no hubo intención de herir a nadie y que el grupo definitivamente no ha estado involucrado en comportamientos misóginos. "No hicimos esto porque no nos gusta el deporte femenino o, como—algunas de las narrativas que están en tendencia ahora son ridículas," dijo. "Crear disturbios en juegos es algo que sucede en cada deporte, ¿no? Lo hemos visto en la NFL, lo hemos visto en hockey, ya sabes...los aficionados haciendo cosas aleatorias para más o menos llamar la atención." Publicaciones de la comunidad de Telegram del grupo, revisadas por ESPN, muestran a un usuario declarando, poco antes del inicio del juego en la noche del primer incidente, "Pronto vamos a comprar la liga."
El 1 de agosto, Delbert Carver de Marietta, Georgia, fue arrestado por presuntamente arrojar un consolador verde a la cancha durante el juego de Dream contra el Phoenix Mercury; según ESPN, los registros policiales muestran que "Carver fue detenido después de intentar huir y confesó haber arrojado el primer juguete sexual el 29 de julio también. Enfrenta cargos de conducta desordenada, indecencia pública/exposición indecente e intrusión criminal." (Carver no respondió a múltiples solicitudes de comentarios de ESPN; @Daldo_Raine dijo a la agencia que Carver no fue el que arrojó el objeto el 29 de julio, pero se negó a decir quién fue.)
El 5 de agosto, un joven de 18 años llamado Kaden Lopez fue arrestado durante el juego Phoenix Mercury-Connecticut Sun, con registros de la corte que, según ESPN, indican que "Lopez sacó un juguete sexual verde de su sudadera, lo arrojó y golpeó a dos espectadores, incluido un menor. Después de lanzarlo, intentó irse del edificio. Un voluntario de la arena presenció el incidente, siguió a Lopez y lo derribó." Aunque niega asociación con Carver, el grupo de monedas meme ha afirmado que Lopez fue parte de su broma; en el chat de Telegram del grupo, al parecer fue llamado un "héroe" y una "leyenda." (A Lopez se le ha imputado por alteración de orden público y asalto.)
El 20 de agosto, Charles Burgess de Dayton, Ohio, se entregó en la 78ª Comisaría de Brooklyn, donde fue acusado de asalto en tercer grado, intento de asalto en segundo y tercer grado, imprudencia temeraria en segundo grado, amenaza en segundo grado, obscenidad en tercer grado, posesión criminal de un arma en cuarto grado, interferencia con un evento deportivo profesional y hostigamiento en segundo grado. Según los fiscales, Burgess sacó un consolador verde de su bolsillo durante un juego de New York Liberty el 5 de agosto y lo arrojó hacia la cancha, golpeando a un niño de 12 años en la pierna. El abogado de Burgess dijo al New York Post que su cliente "se entregó voluntariamente," está casado y tiene seis hijos, y no tiene "absolutamente ningún antecedente criminal." El abogado también afirmó que "la evidencia en video" muestra que "ninguna persona fue realmente golpeada por el objeto arrojado, lo que hace insostenibles cualquier cargo de asalto incluido." Añadió que "el Sr. Burgess tiene la intención de luchar vigorosamente contra estos cargos exagerados y adornados."
¡Seguro parece que sí! Mientras algunos han intentado afirmar lo contrario señalando incidentes similares que han ocurrido en juegos de la NFL, por ejemplo, los fanáticos de los Buffalo Bills han sido conocidos por arrojar consoladores al campo durante juegos contra los New England Patriots, otros no están convencidos. Como señala Christina Cauterucci de Slate, "Los jugadores de fútbol americano usan cascos y protección en un campo 12 veces más grande que una cancha de baloncesto, lo que hace que un consolador volador sea mucho menos peligroso. Y es absurdo pretender que el contexto es idéntico. Arrojar un objeto de silicona en forma de pene, listo para la penetración, a una mujer en su lugar de trabajo envía un mensaje muy diferente que lanzarlo a un hombre."
El 2 de agosto, la WNBA dijo en un comunicado: "La seguridad y el bienestar de todos en nuestras arenas es una prioridad principal para nuestra liga. Los objetos de cualquier tipo arrojados al campo o en el área de asientos pueden representar un riesgo de seguridad para los jugadores, los oficiales del juego y los fanáticos. De acuerdo con los estándares de seguridad de la arena de la WNBA, cualquier fanático que arroje intencionalmente un objeto al campo será expulsado de inmediato y enfrentará una prohibición mínima de un año, además de estar sujeto a arresto y enjuiciamiento por autoridades locales." Unos días después, la entrenadora de Los Angeles Sparks, Lynne Roberts, dijo: "Es ridículo. Es tonto. Es estúpido. También es peligroso, y, ya saben, la seguridad de los jugadores es lo más importante. Respeto por el juego, todas esas cosas."
El 1 de agosto, Cunningham escribió en X: "dejen de lanzar consoladores al campo... nos lastimarán a uno de nosotros." Ese mismo día, la centro de Sky, Elizabeth Williams, le dijo a los periodistas: "Es muy irrespetuoso. Realmente no entiendo el punto. Es muy inmaduro. Quien lo esté haciendo necesita madurar." Isabelle Harrison, ala de New York Liberty, escribió en X: "¿SEGURIDAD DE LA ARENA?! ¿Hola? Por favor haganlo mejor. No es gracioso. nunca fue gracioso. Arrojar CUALQUIER COSA en el campo es muy peligroso." La ex escolta de Phoenix Mercury, Diana Taurasi, dijo a Front Office Sports: "Yo habría recogido ese objeto y se lo habría arrojado de vuelta."
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