La directora de "Saltburn", Emerald Fennell, no conoce a nadie amable | Vanity Fair

Por Chris Murphy

Emerald Fennell sabe reconocer algo hermoso cuando lo ve. Para la serie de Vanity Fair "Notas sobre una escena", la directora de Saltburn profundiza en la construcción de la escena crucial en la que Oliver (Barry Keoghan) llega por primera vez a la mansión británica titular y es llevado a un recorrido por los lujosos terrenos por Felix (Jacob Elordi) antes de pasar un verano fatídico juntos.

Fennell comienza el video elogiando a Keoghan, quien protagoniza Saltburn como Oliver Quick, un estudiante de Oxford marginado que de alguna manera cae en las buenas gracias de Felix, increíblemente popular, encantador y ultra rico. "Lo vi en Killing of a Sacred Deer y pensé: Es la mejor actuación que he visto", dice Fennell. "Simplemente punto. Creo que es la mejor actuación que cualquier actor haya dado... Parece entender lo que realmente amo en todas las películas y lo que realmente quería en esto: es una persona real y también es una especie de sentimiento. Él comprende cómo ser súper sólido y real, pero también cómo ser de otro mundo".

La llegada de Oliver a Saltburn marca lo que Fennell describe como el momento más "gótico, de alguna manera, de la película". La transición del campus de Oxford a Saltburn representa un punto de inflexión, dice ella. "Pasamos del tipo de universidad, tipo Historia Secreta, tipo Brideshead, a como, 'Oh, podemos estar en una especie de película de terror de Hammer'", dice Fennell. En esta casa de terror, Oliver es recibido fríamente por el mayordomo Duncan, interpretado por Paul Rhys. "Duncan es Saltburn", dice Fennell. "Podría haber vivido durante mil años. Podría ser uno de los ladrillos".

Sorprendentemente, la mansión real en la película nunca ha aparecido en ningún medio antes. "No hay fotografías de ella en internet", dice Fennell. Ella sabía que tenía que ser el lugar para la película cuando hizo un recorrido por la propiedad y notó algo peculiar sobre la casa. "Tenían sombreros en los bustos. Los bustos que hay son estas estatuas de mármol invaluables y hermosas, y les habían puesto estos sombreros tontos", dice Fennell, señalando uno en segundo plano de una toma. "Eso es exactamente lo que es esta película. Es una especie de surrealismo y a la vez mundano, lo hermoso y lo tonto, todo junto en uno".

Fennell señala rápidamente que Saltburn, ambientada en 2006 y 2007, es técnicamente una película de época, lo cual quería reflejar en el vestuario. Luego señala la pulsera Livestrong de Felix, a la que llama de manera ingeniosa un "detalle crucial de la época". Para capturar esa época, se aseguró de que Felix estuviera adecuadamente arreglado. "Cabello largo, patillas: eso era 2006", dice.

"Muchas veces los diseñadores de vestuario (Luego de una broma) "dirían: 'Oh, Dios mío, mira, encontramos este vestido súper tonto'", dice Fennell. "Y yo digo: 'Ja, ja, ja. Está en mi armario. Lo uso todo el tiempo. Lo quemaré cuando llegue a casa'".

Fennell quedó inmediatamente impresionada por la audición de la estrella de Euforia, especialmente por la manera en que interpretó a un miembro de la aristocracia británica. "Esto es por lo que Jacob Elordi es un absoluto genio. Y por qué en el momento en que él entró y audicionó para esto, yo quería que interpretara el papel", dice. "Cuando las personas audicionaron, entraron y dieron una especie de actuación estilo Brideshead, fue bastante exuberante y un poco altiva. Y Jacob simplemente entró y hizo esto... era simplemente este tipo normal". Fennell continúa explicando lo difícil que es interpretar personajes "buenos". "Cuando se trata de personajes en general, no creo que ninguno de nosotros sea bueno", dice ella. "Sencillamente no conozco a nadie amable, en realidad. No conozco a nadie bien. Realmente no creo que sea amable".

En cuanto al recorrido de Saltburn: Fennell quería que la audiencia quedara maravillada por la casa, pero también se enfocara en Felix. "Esto es el recorrido de Felix", dice. "Esta es una de las razones por las que elegimos esta casa. Esta casa es tan hermosa, tan excepcional. Pero también era importante para mí, en términos de encuadre, que en realidad, aunque es un recorrido por la casa, a pesar de que todos estamos muriendo por verla, a pesar de que es la casa más hermosa del mundo, no la estamos viendo".