Más jóvenes están siendo afectados por el cáncer y aquí tienes otros datos sobre el cáncer en el 2024 que debes conocer.

Un informe de la Sociedad Estadounidense del Cáncer (ACS) predice un número récord de nuevos casos de cáncer en los EE. UU. en 2024.

El informe, hecho público en CA: A Cancer Journal for Clinicians a principios de este mes, evaluó los patrones generales en la incidencia y mortalidad del cáncer.

El pronóstico de la ACS sugiere que Estados Unidos podría ver aproximadamente 2 millones de nuevos casos de cáncer y más de 611.000 muertes por cáncer en 2024, según datos recientes.

La investigación encontró que los cánceres de pulmón, colorrectal y páncreas son las principales causas de muerte por cáncer.

En la población general se identifica un aumento de los cánceres comunes, incluidos los de mama, páncreas, próstata y riñón. Las personas más jóvenes han visto un aumento en la incidencia de cánceres colorrectales y de cuello uterino.

Jacob Stein, profesor asistente de la División de Oncología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Carolina del Norte, observó que si bien las estadísticas siguen las predicciones de los expertos, las cifras siguen siendo sustanciales.

“Las cifras son una demostración alarmante del impacto del cáncer en nuestro país”, afirmó.

Varias fuentes como los CDC, el Instituto Nacional del Cáncer y otros registros proporcionaron los datos utilizados en el informe. La información sobre la aparición de cáncer llega hasta 2020, mientras que los datos de mortalidad cubren hasta 2021.

Stein señala que el informe ayuda a los profesionales de la salud, los responsables políticos y las organizaciones a elaborar estrategias para el futuro previsible.

Como nota positiva, los datos generales sobre muertes por cáncer se han mantenido estables.

"Durante los últimos 30 años, ha habido una disminución continua en la mortalidad por cáncer, lo cual es una buena señal", afirmó Rebecca Siegel, coautora del informe y directora científica senior de investigación de vigilancia de la Sociedad Estadounidense del Cáncer.

"La disminución de la mortalidad por cáncer ha permitido prevenir más de 4 millones de muertes por cáncer desde los años 90", añadió. Los avances en los tratamientos contra el cáncer, la detección temprana y la disminución del tabaquismo han contribuido a este progreso.

Siegel también señaló que, aunque la nueva incidencia de cáncer refleja la de años anteriores, es la primera vez que Estados Unidos predice un punto de referencia de 2 millones de nuevos casos potenciales de cáncer.

"Ciertos tipos de cáncer, incluidos el de próstata, riñón y algunos cánceres orales, experimentaron un crecimiento del 2 al 3% en el diagnóstico", afirmó Laura Huppert, miembro de la División de Hematología y Oncología del Centro Oncológico Integral Familiar Helen Diller de la UCSF.

De 2015 a 2019, EE. UU. también observó un pequeño aumento en el número de casos nuevos de cáncer de mama, páncreas y cuerpo uterino (endometrio).

Se cree que varias razones, como el crecimiento y el envejecimiento de la población, el aumento de la obesidad y la mejora de los métodos de diagnóstico, entre otras, están detrás del aumento de la incidencia del cáncer.

El cáncer colorrectal es ahora la principal causa de muerte por cáncer entre hombres menores de 50 años y la segunda causa entre mujeres del mismo grupo de edad, lo que representa un rápido cambio con respecto a hace unas décadas.

Por último, el informe de la ACS identificó importantes disparidades raciales en la incidencia y mortalidad del cáncer.

"Por mucho que la gente hable ahora sobre [las disparidades en la salud] y trabaje para lograr avances, creo que esto demuestra que todavía nos queda un largo camino por recorrer", dijo Stein. "Había disparidades raciales en la mortalidad básicamente para todos los tipos de cáncer".

Otro informe, publicado a principios de este mes en JAMA Open Network, encontró que el elevado riesgo general de mortalidad por cáncer de los estadounidenses negros disminuyó ligeramente entre 2000 y 2020, pero aún existían disparidades significativas en los resultados de los cánceres colorrectal, de mama, de próstata y de pulmón en particular.

En comparación con los estadounidenses blancos, los estadounidenses negros tienden a ser diagnosticados con cánceres más agresivos, tienen tasas de mortalidad más altas y tienen menos acceso a una atención de calidad, explicó Siegel.

"Honestamente, hay brechas en todos los puntos del espectro del cáncer, y eso es lo que contribuye a estas disparidades amplias y distintas", dijo.

Según Stein, los datos descritos en el informe anual de la ACS suelen ser un punto de partida para futuras investigaciones.

Puede inspirar más investigaciones sobre las preguntas planteadas por la ACS, incluida cómo la pandemia de COVID puede haber afectado las tasas de cáncer, por qué las personas más jóvenes padecen cáncer con más frecuencia y qué herramientas pueden cerrar eficazmente las brechas en la mortalidad por cáncer entre los estadounidenses de color.

Estas estadísticas también son un buen recordatorio de que hay que hacer todo lo posible para evitar el cáncer. Por un lado, eso significa adoptar estilos de vida asociados con un menor riesgo de cáncer.

"Estimamos que alrededor del 40% de todos los cánceres que se diagnostican son potencialmente prevenibles mediante modificaciones de comportamiento", dijo Siegel.

Eso significa que, siempre que sea posible, las personas deben hacer todo lo posible para mantener un peso saludable, mantenerse activas, dejar de fumar, limitar el consumo de alcohol y llevar una dieta rica en frutas y verduras y baja en carnes rojas o procesadas, dijo.

Más importante aún, el aumento de la incidencia del cáncer debería impulsar a las personas a hacerse pruebas de detección de diferentes tipos de cáncer.

Muchos de los cánceres que preocupan en este informe (a saber, el cáncer de cuello uterino, colorrectal y de pulmón) son todos susceptibles de detección, explicó Stein. Recomendó que las personas utilicen pruebas de Papanicolaou, colonoscopias, vacunas contra el VPH, tomografías computarizadas (TC) y otras herramientas disponibles para que estos cánceres puedan detectarse temprano.

Por ejemplo: 340 personas mueren diariamente de cáncer de pulmón. Para abordar este problema, la Sociedad Estadounidense del Cáncer ha ampliado sus pautas anuales de detección del cáncer de pulmón, pero la mayoría de las personas aún no las aprovechan.

"Relativamente pocos pacientes se han sometido a este examen; se estima que solo el 6% de los pacientes elegibles en 2020", dijo Huppert. "Es importante que las personas que tienen antecedentes de tabaquismo y [que] son elegibles para este examen lo hablen con sus médicos".

En última instancia, la acción preventiva es clave.

"[Se trata] simplemente de comprender realmente cuáles son sus antecedentes familiares y luego actuar en consecuencia hablando con su médico sobre cuándo es adecuado que usted comience a hacerse pruebas de detección", dijo Siegel.