Dolce & Gabbana: Mujer fatal & rol
Dolce & Gabbana: diva y rock peligrosos
Publicado el 24 de febrero de 2024
En el evento de moda del sábado en Milán, el dúo dinámico Domenico Dolce y Stefano Gabbana mostraron su maestría única, creando una colección exclusiva de Dolce & Gabbana, basada en el tema de la diva peligrosa y el rock.
Domenico y Stefano pueden, a diferencia de cualquier diseñador del mundo, producir una emoción extrema. Esto fue evidente en su colección 90% negra, con modelos divertidas adornadas con numerosos diseños de lencería, acentuados por boinas y tocados, con el cabello recogido en moños, evocando el ambiente clásico de la sociedad de café francés.
La colección puso un gran énfasis en una excelente sastrería. Comprendía innovadores esmoquin fluidos transformados en chaquetas desordenadas, esmoquin minimalistas con mangas alargadas, dramáticos abrigos de funeraria y distinguidos abrigos urbanos para la mujer refinada. Lo que más llamó la atención fue una extravagante chaqueta de húsar de oficial de caballería combinada con bragas de seda negras, un fajín y piernas infinitas. Pocas veces se ha visto una exhibición tan grandiosa de medias y sujetadores en una casa de moda líder, un alejamiento de la opulencia habitualmente sutil.
Toda la colección, con sus imponentes hombros, sus inusuales bolsillos y sus atrevidas solapas, no llevaba ni un solo logotipo, sino que encarnaba rotundamente la estética 'Dolce & Gabbana'. La colección rezumaba un ambiente de sociedad de café fresco y natural, una imagen de una mujer hermosa y segura de sí misma preparándose para la cita de un amante.
El desfile contó con modelos de renombre como Amber Valletta con un llamativo abrigo de plumas de marabú y cintas de grosgrain, que evocaba la apariencia de un pájaro de fantasía, y Eva Herzigova con una cautivadora apariencia gamine. El desfile de moda alcanzó su clímax en medio de fuertes vítores, aplausos y patadas cuando Naomi Campbell hizo una gran entrada con un sujetador de encaje, medias, una combinación transparente y guantes de dominatriz, con los hombros moviéndose dramáticamente.
Los diseñadores concluyeron el espectáculo con un entusiasta aplauso, ejemplificando cómo se mantuvieron auténticamente fieles a la estética de su diseño.