El estudio muestra que la tendencia humana a ayudar a los demás es universal.

20 Abril 2023 1995
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20 de abril de 2023

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por Universidad de Sydney

Un nuevo estudio sobre la capacidad humana para la cooperación sugiere que, en el fondo, las personas de diversas culturas son más similares de lo que se podría esperar. El estudio, publicado en Scientific Reports, muestra que desde las ciudades de Inglaterra, Italia, Polonia y Rusia hasta los pueblos rurales de Ecuador, Ghana, Laos y Australia aborigen, en la escala micro de nuestra interacción diaria, la gente en todas partes tiende a ayudar a los demás cuando se necesita.

Nuestra dependencia mutua para obtener ayuda es constante: el estudio muestra que, en la vida cotidiana, alguien señalará la necesidad de asistencia (por ejemplo, para pasar un utensilio) una vez cada 2 minutos y 17 segundos en promedio. En todas las culturas, estas pequeñas solicitudes de ayuda se cumplen siete veces más a menudo de lo que se rechazan. Y en las raras ocasiones en que la gente lo hace, explican por qué. Esta tendencia humana a ayudar a los demás cuando se necesita, y a explicar cuando no se puede dar tal ayuda, trasciende otras diferencias culturales.

Los hallazgos ayudan a resolver un rompecabezas generado por investigaciones antropológicas y económicas previas, que han enfatizado las diferencias entre personas de diversas culturas en cómo se comparten los recursos. Por ejemplo, mientras que los cazadores de ballenas de Lamalera en Indonesia siguen normas distributivas al compartir una gran captura, los cazadores-recolectores Hadza de Tanzania comparten comida más por miedo a generar chismes negativos. Mientras que se espera que los ricos habitantes de la aldea Orma en Kenia paguen por bienes públicos como proyectos de carreteras, estas ofertas entre los Gnau de Papua Nueva Guinea probablemente serían rechazadas ya que crearían una obligación incómoda de reciprocidad.

Las diferencias culturales como estas presentan un desafío para nuestra comprensión de la cooperación y ayuda en nuestra especie: ¿Nuestras decisiones sobre compartir y ayudar se moldean por la cultura en la que crecimos? ¿O los humanos son igualmente generosos y entregados por naturaleza? Este nuevo estudio global descubre que, si bien las ocasiones especiales y los intercambios de alto costo pueden atraer la diversidad cultural, cuando nos enfocamos en el micro-nivel de la interacción social, la diferencia cultural en su mayoría desaparece, y la tendencia de nuestra especie a dar ayuda cuando es necesaria se vuelve universalmente visible.

Información del diario: Scientific Reports

Facilitado por: Universidad de Sydney


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