Antes de los antiguos egipcios, la naturaleza esculpía esfinges. Aquí tienes cómo.
Se especula que la Gran Esfinge de Giza fue tallada naturalmente por los vientos del desierto antes de la intervención humana. Esta teoría se basa en las sorprendentes similitudes entre los accidentes geográficos desérticos conocidos como yardangs y los leones sentados, lo que sugiere que un yardang con forma de león podría haber sido la base para tallar la Esfinge por parte de los antiguos egipcios. La estructura aparentemente simple pero única de estas formaciones rocosas se analiza en la edición de noviembre de Physical Review Fluids. Un equipo de científicos pudo crear pequeños yardangs parecidos a una esfinge a partir de arcilla en un túnel de agua replicando las condiciones bajo las cuales los yardangs forman la dirección del viento y una mezcla de material erosionable y resistente.
Elena Favaro, geomorfóloga de la Universidad Abierta de Milton Keynes, Inglaterra, que no participó en el estudio, señaló que si bien el proceso de formación del yardang no está del todo claro, estas formaciones son prominentes en las regiones desérticas donde se crea una erosión eólica extendida. crestas aerodinámicas dirigidas hacia los vientos actuales. Elogió el estudio y lo calificó de enfoque innovador para comprender la formación del yardang.
Decidido a comprender la creación de yardangs en forma de esfinge, el matemático aplicado Leif Ristroph de la Universidad de Nueva York y su equipo decidieron estudiar este fenómeno en un laboratorio. Realizaron experimentos que replicaron años de erosión en unas pocas horas utilizando un túnel de agua, utilizado tradicionalmente para estudiar el flujo de fluidos alrededor de objetos rígidos como las alas de los aviones.
Ristroph y su equipo llevaron a cabo numerosas pruebas utilizando el túnel de agua, comenzando cada experimento con una masa rígida de pasta de arcilla, incrustada con trozos de plástico duro para simular formaciones rocosas naturales, y permitiéndole erosionarse bajo un "viento" de agua constante. El resultado fue un gran parecido con los mini-yardangs tipo Esfinge, independientemente de la forma inicial de la masa o de la ubicación de los trozos de plástico.
Para visualizar el flujo alrededor de las formas de miniesfinges talladas en arcilla, los científicos imprimieron en 3D réplicas de las formas y las cubrieron con arcilla cargada de tinte fluorescente. Pero como las esfinges de arcilla se disolvieron rápidamente, los investigadores tuvieron que ser innovadores y escanear los mini-yardangs, modelos de plástico reutilizables impresos en 3D. Antes de cada experimento, cubrieron los modelos de plástico con una fina capa de arcilla teñida de forma fluorescente.
La arcilla brillante del túnel de agua permitió a los investigadores rastrear las corrientes en forma de remolino que rodean la masa, revelando patrones que potencialmente pueden modelarse matemáticamente. Estos incluían una "melena" turbulenta de remolinos que emanaban de la cabeza de la Esfinge y magnetizaban una columna vertebral felina inclinada. Ristroph espera que más investigaciones puedan explorar la importancia potencial de estas pequeñas gotas de agua para comprender los efectos de la erosión eólica en rocas del tamaño de un paisaje.